Deutsche Grammophon reedita «Infra», el más personal de los primeros discos de Max Richter.
En 2014 Max Richter firmó con el prestigioso sello discográfico Deutsche Grammophon. Además de lanzamientos posteriores, el contrato incluía la reedición de varios de sus trabajos previos más exitosos, entre los que figuraban 24 Postcards in Full Colour, Songs from Before y The Blue Notebooks, así como una grabación orquestal de Memoryhouse, que aparecería en septiembre de ese mismo año.
Dentro de esas reediciones se incluyó también uno de sus trabajos más importantes, Infra, que había aparecido originalmente en 2010 en el sello FatCat Records. Se trataba del disco con el que da comienzo lo que hoy se considera el estilo característico de Richter (Hamelin, Baja Sajonia, 1966), que nació como resultado de una colaboración con el coreógrafo británico Wayne McGregor y el pintor y artista plástico Julian Opie –que desarrolló una serie de películas de animación paa el espectáculo– para el Royal Ballet, estrenada el 13 de noviembre de 2008 en la Royal Opera House de Londres.
La coreografía de Infra estaba inspirada en los momentos de terror causados por las cuatro bombas que los terroristas islámicos hicieron estallar en el sistema de transporte público de Londres el 7 de julio de 2005, el segundo mayor atentado terrorista en Europa tras los del 11-M de 2004 en Madrid. McGregor le pidió a Richter 25 minutos de música para el ballet, pero después de trabajar en la música para el espectáculo, las ideas musicales para Infra no dieron tregua al compositor alemán, nacionalizado británico, que retomó la obra y elaboró un álbum más largo, compuesto para piano, cuarteto de cuerda y electrónica, que ya contenía el lenguaje sonoro poético de Richter. Infra sigue, en líneas generales, el estilo de álbumes anteriores como The Blue Notebooks y Songs From Before, que, con sus miniaturas finamente forjadas, eran creaciones exquisitas, pero a veces demasiado imperturbables para ser completamente envolventes. Pero si hasta entonces se tenía la sensación de que su melancolía era demasiado fácil, Infra se nos aparece como una obra madura, capaz de rastrear la gama de grises entre el blanco y el negro de los estados de ánimo.
La obra se compone de cinco movimientos oníricos –Journeys– y las ocho partes de Infra propiamente dichas, concebidas como una búsqueda de capas ocultas de sonido. En el álbum, Max Richter combina sonidos electrónicos y acústicos con melodías de cuerda clásico-románticas y meditaciones de piano minimalistas. Se oyen señales Morse o el siseo de ondas de radio. Pero nada más acostumbrarse a esta moderna poesía sonora, uno se ve transportado a esferas de añoranza que recuerdan al Winterreise de Franz Schubert –Richter afirmó que la idea de viaje presente en las películas de Opie del espectáculo, le hizo pensar en la citada obra cumbre de Schubert–, así como el poema de T. S. Eliot La tierra baldía.
Max Richter prepara el camino para que el oyente se sumerja en un estado de ánimo indulgente, escuche la propia alma y afloren sentimientos de reconciliación, a pesar de toda la melancolía que destila.
© Fotografía correspondiente a la portada original del disco de Max Richter, realizada por el artista Julian Opie.