50 años de «Pictures at an Exhibition», de EL&P.
En noviembre de 1971, apenas un año y medio después de su formación, Emerson, Lake & Palmer ya era un grupo admirado internacionalmente. En realidad, un «supergrupo», en la terminología de aquella época, una banda formada por músicos que ya habían alcanzado el éxito, bien por separado o bien formando parte de otras bandas. El teclista Keith Emerson venía de The Nice y Greg Lake, de King Crimson. En la búsqueda de un batería, decidieron contar con Carl Palmer, de Atomic Rooster.
La formación clásica de Keith Emerson sobresaldría siempre como el motor de esta nueva banda: The Barbarian, el tema con el que se abría su primer álbum, titulado igual que el grupo, Emerson, Lake & Palmer, era un arreglo del Allegro barbaro de Béla Bartók, y otro tema, Knife Edge, estaba basado en el primer movimiento de la Sinfonietta de Leoš Janáček y la alemanda de la Suite francesa nº 1 en re menor, BWV 812, de Juan Sebastián Bach.
Keith Emerson, además, estaba obsesionado por Cuadros en una exposición, la suite para piano compuesta por Modest Músorgski en 1874, que Emerson había escuchado en el Royal Festival Hall de Londres en la versión orquestal que Maurice Ravel había realizado en 1922 y que fue la que le granjeó su popularidad internacional.
Esa obsesión llegó al punto de querer realizar una versión en clave de rock, que el grupo comenzó a ofrecer en directo desde su segundo concierto. El 9 de diciembre de 1970 el grupo grabó y registró cinematográficamente su interpretación en el Lyceum Theatre de Londres, pero descontentos con el sonido logrado, planearon una nueva grabación que pagaron de su bolsillo y llevaron a cabo, finalmente, el 26 de marzo de 1971, en el Newcastle City Hall. Su intención inicial era que saliera publicado inmediatamente, pero su compañía discográfica se negó, aduciendo que era una apuesta comercial casi suicida. El grupo tuvo se vio obligado a aceptar la situación, pero después de que una emisora neoyorquina, la WNEW-FM, emitiera en su totalidad la grabación (propiedad del grupo), y se comprobara el interés del público por hacerse con él, Atlantic Records lo publicó en noviembre de 1971, apenas unos meses después de que se hubiera publicado, Tarkus, que quedará así, para la historia, como el segundo álbum de E, L & P.
El disco, de unos 38 minutos de duración, no es una versión completa de la suite de Músorgski: sólo aparecen arreglos de cuatro de las partes compuestas por el ruso, además de Promenade, que sirve de nexo de unión entre ellas, ya que su interpretación sí se realizó seguida, como una única pieza, en la que se intercalaron partes compuestas por el grupo. El final del disco, el bis en el concierto, es una versión del Cascanueces de Tchaikovski.
Su interpretación, en aquellos momentos, supuso todo un atrevimiento y aún hoy se le puede considerar no sólo uno de los mejores álbumes de Emerson, Lake & Palmer, sino uno de los mejores álbumes de rock en vivo jamás grabados y un documento seminal de la era del rock progresivo, que hizo, probablemente, más por despertar el interés por Músorgski que las clases regladas de música. Por supuesto, para los puristas, el elevado volumen y muchos de los atrevimientos instrumentales (no sólo acoples, sino toda una serie de golpes a los teclados electrónicos de Emerson y el estruendo de la enorme batería de Palmer) debió ser anatema. Hoy su escucha sigue resultando atractiva y puede descubrir, incluso, matices que en su momento pudieron pasar desapercibidos. Las versiones más largas de este disco que se pueden localizar actualmente, corresponden a la versión grabada (y desechada originalmente) en el Lyceum Theatre de Londres.