La Bienal de Venecia ha concedido el León de Oro a la Trayectoria Musical al compositor británico Brian Eno.
La Bienal de Venecia ha concedido el León de Oro a la Trayectoria Musical al compositor británico Brian Eno, «por sus investigaciones sobre la calidad, belleza y difusión del sonido digital y por su concepción del espacio acústico como instrumento compositivo».
La ceremonia de entrega del León de Oro tendrá lugar el 22 de octubre de 2023 en la sala de columnas de Ca’ Giustinian, sede de la Bienal. La sexagésimo séptima edición del Festival Internacional de Música Contemporánea se celebrará en Venecia del 16 al 29 de octubre de 2023, bajo la dirección de Lucia Ronchetti. La edición se titulará Micro-Music y pretende poner de relieve «la fascinación y la riqueza de expresión del sonido digital». El programa contará con eventos diarios centrados en las nuevas formas de composición por ordenador y algorítmica, la interpretación experimental y la música generativa.
«Desde el principio de su carrera –escribe Lucia Ronchetti en la motivación del premio– las composiciones de Brian Eno han sido concebidas en términos de un proceso generativo que evoluciona en una dimensión temporal potencialmente infinita, prefigurando muchas de las tendencias compositivas actuales vinculadas al sonido digital. Su concepción del estudio de grabación como metainstrumento con fines compositivos, dominio para el procesamiento, multiplicación y ensamblaje de fragmentos sonoros grabados, simulacros acústicos y objetos sonoros autónomos, ha permitido a Brian Eno crear un espacio electrónico inmersivo que transforma e impregna la realidad sonora que nos rodea, de acuerdo con dramaturgias siempre cambiantes. Gracias a su comprensión de la música grabada como un vasto archivo de fragmentos sonoros infinitesimales, una paleta acústica infinita a disposición del compositor, una mise en abyme de la historia de la música. La música ambiental generativa es percibida por Brian Eno como la creación conceptual de una semilla capaz de desarrollarse, más que como un árbol ya diseñado en todos sus detalles, invocando un paradigma compositivo inspirado en la biología más que en la arquitectura, capaz de evolucionar por sí mismo y generar constantemente nuevos paisajes sonoros».
Aparte de la música, Brian Eno ha ampliado su desarrollo creativo personal dedicándose a una multiplicidad de disciplinas: pintura, escultura o videoarte. Un caleidoscopio expresivo que ha hecho circular a través de sus obras, presentadas en los diversos festivales de La Biennale di Venezia: en 1985 Brian Eno participó en la 42ª edición del Festival Internacional de Cine de Venecia (sección Video music) con la película de ochenta minutos Thursday Afternoon, que dirigió y para la que escribió el guión y la música; al año siguiente presentó una de sus esculturas visuales, Installazione di suoni, luci e video para la 42ª Exposición Internacional de Arte titulada Arte y Ciencia (en la sección de Biología, Tecnología e Informática); fue invitado de nuevo en 2006, esta vez a la Biennale Musica, con una compleja vídeo-instalación distribuida en tres espacios conectados, Painting like Music. Este año, con motivo de la Biennale Musica, Brian Eno presentará el estreno mundial de su proyecto Ships en el Teatro La Fenice el 21 de octubre, en una actuación en la que participarán la Filarmónica del Mar Báltico dirigida por Kristjan Järvi, el actor Peter Serafinowicz y sus colaboradores habituales, el guitarrista Leo Abrahams y el diseñador de software Peter Chilvers, interactuando con las atmósferas orquestales difundidas y procesadas para el particular espacio acústico del teatro.
Brian Eno será también el tema de Nothing Can Ever Be The Same, una instalación de videoarte generativo del cineasta estadounidense Gary Hustwit y el artista digital británico Brendan Dawes, que podrá verse en estreno mundial del 22 al 29 de octubre en la Sale d’Armi del Arsenale. Nothing Can Ever Be The Same es una pieza de vídeo inmersiva de 168 horas de duración que utiliza la música, las ideas, el arte y otros materiales documentales de Eno para construir una vasta paleta de sonidos e imágenes interpretados por un software generativo personalizado. Pieza innovadora de arte visual, Nothing Can Ever Be The Same crea una convergencia siempre cambiante entre la creación artística y la experimentación digital, y ofrece una visión única del desarrollo del arte del compositor británico.