Menú Cerrar

El sello noruego LAWO Classics y el berlinés bastille musique publican dos lanzamientos diferentes de obras de Gérard Grisey.

Casualidad o no –y casi coincidiendo con el lanzamiento de la biografía de Gérard Grisey escrita por el periodista estadounidense Jeffrey Arlo Brown, The Life and Music of Gérard Grisey–, hace escasas semanas se produjeron dos lanzamientos discográficos distintos de obras de Grisey. Por un lado, el sello noruego LAWO Classics publicó en mayo la primera grabación jamás realizada de Mégalithes y, por otro, el sello berlinés bastille musique hizo lo propio en junio con Gérard Grisey: Dérives, que incluye tres composiciones de Grisey: la que da título al disco, L’icône paradoxale y Mégalithes.

Este último disco ofrece grabaciones de la WDR Sinfonieorchester dirigida por Sylvain Cambreling (en el caso de Dérives y L’icône paradoxale, dos obras clave de Grisey, la primera compuesta entre 1973 y 1974 y la segunda entre 1992 y 1994) y Emilio Pomàrico (Mégalithes) y un libreto trilingüe de 64 páginas (en inglés, francés y alemán) con artículos de Jeffrey Arlo Brown y una entrevista con Sylvain Cambreling. Por su parte, el disco de LAWO se centra exclusivamente en Mégalithes, una obra de juventud de Gérard Grisey, compuesta en 1969, cuando Grisey tenía 23 años. Cuando escribió esta pieza para trompas, trompetas, trombones y tuba aún no obedecía a los patrones espectralistas (un término que, por otra parte, tampoco satisfacía al compositor. Lo que sí se percibe en Mégalithes es la influencia de Xenakis y que Grisey ya estaba obsesionado por la vida interior del sonido y ansioso por explorar el modo en que sus propiedades podían afectar al público, especialmente el peso, la densidad y la textura de un robusto conjunto de metales como el aquí presente.

Mégalithes es una obra que dura alrededor de diez minutos, pero su partitura modular –nueve secuencias musicales que pueden ser interpretadas en cualquiera de sus nueve posiciones– hace que aquí se ofrezcan dos versiones diferentes (la 3 y la 7), ambas a cargo del director noruego Halldis Rønning dirigiendo a los cinco miembros del NyNorsk Messingkvintett y a otros diez consumados músicos invitados. Intercalada entre esas dos versiones figura Untitled Echoes For Adjacent Rooms del compositor electroacústico noruego Anders Tveit, una obra encargada para el festival Only Connect en 2018, que cuenta con el subtítulo Listening To Gérard Grisey.