El sello Fanfare Cincinnati publica «Man Made», de David Lang, interpretada por Sõ Percussion y la Orquesta Sinfónica de Cincinnati.
Estrenada en el Barbican Center de Londres en mayo de 2013 por la Orquesta Sinfónica de la BBC y el cuarteto estadounidense de percusión Sõ Percussion, David Lang compuso Man Made con el Concerto Fantasy for Two Timpanists and Orchestra de Philip Glass en mente. El objetivo de Lang era plantear partituras complementarias para los percusionistas del cuarteto y los de la propia orquesta. De hecho, el concierto fue escrito expresamente para Sõ Percussion, una formación que suele emplear en sus actuaciones objetos encontrados o construidos por ellos mismos. El papel de los instrumentistas de la orquesta, según explicaba David Lang en su web, era el de «traducir» el sonido de los objetos empleados por los estadounidenses y replicarlo con el sonido de los instrumentos de percusión propios de una orquesta sinfónica. En el comienzo de la obra, por ejemplo, los solistas hacen crujir unas finas ramitas de árboles, lo que los percusionistas orquestales traducían con cajas chinas, marimba y xilófono.
Ocho años después de aquel estreno mundial, el 25 de septiembre de 2021, la Orquesta Sinfónica de Cincinnati (CSO, por sus siglas en inglés), dirigida por Louis Langrée, ofreció un programa para el que acogió a Sõ Percussion interpretando Man Made y ese concierto, que fue grabado en directo, ha sido ahora publicado por Fanfare Cincinnati, el propio sello de la CSO.
La obra, que estrenó en Estados Unidos el mismísimo Gustavo Dudamel con la Filarmónica de Los Ángeles, ofrece el contrapunto a las piezas reposadas que son por las que Lang es más conocido –entre las que destaca su The Little Match Girl Passion, por la que en 2008 recibió el premio Pulitzer de música–. No se esperen avalanchas ruidosas como en la Ionisation de Edgar Varèse o las Pleiades de Xenakis, porque, aunque después del tenue inicio, con el famoso chasqueo de ramitas (y una ligera amplificación para que también se pueda oír la caída de alguna de las ramitas al suelo) la música se vuelve vertiginosa y llena de movimientos zigzagueantes, nunca pretende sembrar el desconcierto en el espectador. Permítaseme un inciso: Lang es uno de los tres compositores fundadores de la organización Bang on a Can, cuyo nombre se debe al primer compositor que convirtió en música golpear una lata (bang on a can), John Cage, que también fue el primero en romper una ramita amplificada y llamar a ese sonido música.
Además de las ramitas, los miembros de Sõ Percussion golpean botellas de vino afinadas y un cubo de basura, además de instrumentos convencionales, como xilófonos y tambores, a lo que los percusionistas de la orquesta responden primero como lo que Lang ha definido como traductores, captando los sonidos de los solistas y transmitiendo su traducción después al resto de la orquesta. Las cuerdas y los vientos encuentran, por su parte, sus propios ritmos asimétricos, con ataques percusivos tonalmente coloridos. Hay, en total, cuatro ciclos, y en cada uno de ellos la orquesta crece lentamente en sonido y complejidad, transformando y ocultando a los solistas, tal y como sucede en la naturaleza: transformamos nuestro entorno natural, construimos a su alrededor y pronto no queda ni rastro. Pero Man Made –que, no lo olvidemos, significa «hecho por el hombre» no se convierte en una distopía apocalíptica: la naturaleza, como la energía, no se pierde, solo se transforma y, a veces, incluso, se mejora.