Concluye el «Modular Music» berlinés

«Rainforest IV», de David Tudor, en la clausura del festival berlinés de «música modular».

Singuhr, la galería berlinesa especializada en arte sonoro, concluye una nueva edición de su festival de «música modular» con una serie de nuevas interpretaciones de Rainforest IV, la pieza de David Tudor compuesta en 1973, que tendrán lugar en la iglesia de Santa Isabel de Berlín entre el jueves 17 y el domingo 27 de marzo. Para la presentación, un total de siete compositores, músicos experimentales y artistas sonoros (Jessica Ekomane, Hanna Hartman, Robert Lippok, Zsolt Sörés, Ioana Vreme Moser, Michael Winter, Miki Yui) han estado trabajando juntos en una fase de ensayo y composición de una semana, reinterpretando la pieza de Tudor. El compositor canadiense Matt Rogalsky, uno de los más experimentados especialistas en Tudor, ha sido el encargado de dirigir, junto con el compositor de Colonia Hans W. Koch, el estreno mundial de esta iteración de la composición, que se celebra mañana jueves a las 18:00.

Objetos encontrados, transformados o construidos se disponen como un conjunto en una instalación espacial. Los transductores colocados en los objetos permiten a los intérpretes activarlos con sonidos de su propia elección, con el objetivo de crear, en palabras de Tudor, «un ecosistema electrónico». Debido a las frecuencias de resonancia específicas de cada objeto, cada uno es una especie de altavoz singular que favorece determinados tonos. La composición, la selección de los objetos y la disposición en el espacio crean una «selva» exuberante y accesible libremente de sonidos que surgen de las cosas de la vida cotidiana.

Junto a John Cage, David Tudor fue una de las figuras centrales de la escena musical estadounidense de la segunda mitad del siglo XX. Su importancia en el desarrollo de la música experimental, ya sea como intérprete, compositor, ejecutante o pionero de la electrónica en vivo, es incuestionable. Este proyecto se gestó veinticinco años después de su muerte –en 1996– no sólo como un homenaje al músico y compositor, sino que se centra principalmente en el potencial que aún reside en Rainforest como plataforma compositiva. Los artistas participantes tienen formación en géneros muy diversos: compositores de formación «clásica» como la sueca Hanna Hartman y el estadounidense Michael Winter; artistas sonoros y mediáticos como la japonesa Miki Yui, el músico húngaro Zsolt Sörés y la joven artista rumana Ioana Vreme Moser, así como artistas del ámbito de la música electrónica y experimental como la artista sonora francesa Jessica Ekomane o el berlinés Robert Lippok, antiguo miembro de la banda to rococo rot, han trabajado juntos, permitiendo un tipo de colaboración que va más allá de los límites de la escena, en un entorno totalmente desacostumbrado para todos los implicados.