Miquel Àngel Marín.
Miquel Àngel Marín responde a las preguntas de J.G. Entonado:
Javier, me gusta mucho lo que planteas, son cuestiones que también me interesan especialmente.
Hablas de trompetas. Hablar de instrumentos musicales me parece importante. Es como hablar de la casa en la que uno vive, una casa de resonancia, una casa que nunca es inerte, una casa habitada, como nos recuerda Bachelard.
Dices que “esas trompetas me sugieren ideas, que podrían considerarse extrañas…”. Esa extrañeza también me parece importante. Una trompeta nunca es una trompeta, si es que estamos hablando de poesía, de metamorfosis. Y una trompeta abollada ya es una trompeta alterada, ya es una posibilidad de poesía, de metamorfosis. El sonido convencional, estándar procede de una orden que ha sido dada y no ejecutada por el músico poeta.
“Esas trompetas tuyas me sugieren que están relacionadas con una manera concreta de entender la vida”.
Mi visión del mundo estructura mi personalidad, me da una fisonomía espiritual. Mi teoría y mi práctica del mundo musical, es mi actitud en este mundo musical. Tal como me relaciono con el mundo, esa es la sintaxis de mis escritos, de mis escrituras musicales.
Una cita dispersa, encontrada: “El cuerpo que se inscribe en el texto, es un cuerpo dispersado”.
La música no es ni un absoluto ni un modelo de nada, y menos de bondad y belleza, ese es su peligro, su agujero negro.
Fascinación por la naturaleza del sonido. Buscar algo en la música más allà de lo estético. Precisamente la música, que es el hiperparadigma de lo estético, de lo bello.
Otra cita dispersa, encontrada: “La literatura: una clase de actividad en lugar de una representación”. Quien dice literatura dice música.
Estas eran las tres normas de la Portsmouth Sinfonia, uno de cuyos fundadores fue Gavin Bryars: 1. Cualquier persona puede formar parte de la orquesta. 2. La asistencia a los ensayos es obligatoria. 3. Quien haya estudiado música no podrá tocar su instrumento base. En esta orquesta, Brian Eno tocaba el clarinete y Michael Nyman el bombardino.
* Texto de Lacarne Magazine cedido por J. G. Entonado
Miquel Ángel Marín es clarinetista y compositor. Formado en los conservatorios de Barcelona y de Karlsruhe (Alemania), compagina el repertorio clásico con la libre improvisación. Ha colaborado con orquestas y conjuntos de cámara en el mundo. Trabaja también en los campos de la acción musical, poesía, performance, clarinete preparado y vídeo.