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«Canto Ostinato», de Simeon Ten Holt, en versión de Jeroen y Sandra van Veen.

El compositor Simeon Ten Holt falleció en 2012. Fue uno de los compositores más importantes de los Países Bajos en el siglo XX. A lo largo de su carrera se dedicó al serialismo, al neoclasicismo y a muchas otras corrientes de la música clásica contemporánea. Sin embargo, la obra por la que es más conocido es su Canto Ostinato, una obra extraordinaria, repetitiva, minimalista, que compuso entre 1976 y 1979 y está formada por más de cien secciones. La obra destaca por el hecho de que todas las decisiones de interpretación se dejan en manos de los intérpretes, incluidos dinámica, tempo y timbre, lo que significa que nunca hay dos interpretaciones iguales. De hecho, hasta la instrumentación puede cambiar y hay muchos ejemplos de ello. Entre las interpretaciones de esta obra hay versiones para cuatro pianos, para dos pianos, para dos marimbas, para arpa y electrónica, para ocho violonchelos y muchas más.

Por su parte, el también neerlandés Jeroen Van Veen (Herwen en Aerdt, Güeldres, 1969) es un compositor y pianista que se ha especializado en el repertorio minimalista –suya es, entre otras muchas grabaciones, la colección Minimal Piano Collection, con casi treinta horas de música, en otros tantos cedés, publicada por el sello Brilliant Classics, con obra de Dennis Johnson, Tom Johnson, Peter Garland, Julius Eastman, Kyle Gann o Chiel Meijering, además de los imprescindibles Glass, Reich, Adams, Riley, La Monte Young, Meredith Monk, Pärt, Wim Mertens o Michael Nyman, entre otros muchos, muchos autores–, así que la confluencia entre Ten Holt y Van Veen era lógica. Y, de hecho, Van Veen ya ha grabado varias versiones del Canto Ostinato, que se ha convertido no sólo en la obra más conocida de Ten Holt, sino también en la más interpretada, tanto dentro como fuera de su país, y es en la actualidad algo así como una seña de identidad cultural del pequeño país centroeuropeo.

En esta nueva versión Jeroen interpreta la obra acompañado por su esposa, la pianista Sandra Van Veen (de soltera, Sandra Mol). La grabación se extiende hasta las 3 horas y 23 minutos, con 26 de las secciones previstas por su autor, que incluye, intercaladas, Incanto 6, tres piezas compuestas por el propio Van Veen inspiradas en la propia obra de Ten Holt.

La obra en sí es envolvente, vivaz, hipnótica y minimalista y repetitiva, como cuando Nyman aplicó el término por primera vez… Para quien conozca la obra, acercarse de nuevo a ella no le supondrá ningún problema. Para quien no la conozca, en cambio, le supondrá toda una sorpresa y, desde luego, un hallazgo. Y si alguien quiere presenciar la obra en directo, Van Veen tiene varias fechas previstas en febrero, marzo y abril en diversas ciudades de los Países Bajos.