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Bertrand Chamayou publica en Erato los «Vingt regards sur l’Enfant-Jésus» de Olivier Messiaen.

Compuesto en 1944, el ciclo de Vingt regards sur l’Enfant-Jésus (Veinte miradas sobre el Niño Jesús) es una de las grandes obras del repertorio pianístico, pudiendo situarse a la altura de piezas tan fundamentales como El clave bien temperado de Bach o las 32 sonatas para piano de Beethoven por su envergadura. Compuesta en un momento de gran sufrimiento humano y de privaciones personales (Messiaen lo compuso en 1944, después de su liberación del campo de prisioneros de guerra Stalag VIII-A de Görlitz, donde escribió el Cuarteto para el fin de los tiempos, pero todavía bajo la ocupación nazi de París), la obra es una celebración de la Natividad y de la importancia que como católico devoto le daba Messiaen al nacimiento de Cristo.

Esta nueva versión para el sello francés Erato, realizada por el pianista francés Bertrand Chamayou (Toulouse, 1981), incluye, además de las veinte piezas del ciclo, sus interpretaciones de cinco piezas compuestas por otros tantos compositores en homenaje a Messiaen: Anthony Cheung (Live Ear Emission!, de 2001), el desaparecido Toru Takemitsu (Rain Tree Sketch II, de 1992, escrita tras la muerte de Messiaen para un concierto de homenaje en Les Semaines Musicales Internationales d’Orléans), Tristan Murail (Cloches d’adieu, et un sourire…, otra obra compuesta el mismo año del fallecimiento de Messiaen), György Kurtág (Humble regard sur Olivier Messiaen, de 1993) y Jonathan Harvey (Tombeau de Messiaen, de 1994).

Chamayou interpretó Vingt regards sur l’Enfant-Jésus por primera vez en 2008, año del centenario del nacimiento de Messiaen, y define la obra como «un fresco gigante, una especie de odisea […] una experiencia más mística que religiosa… Despierta el mismo tipo de asombro que entrar en una magnífica catedral o ver una gloriosa puesta de sol. Sientes que el tiempo se detiene […] Creo que puedo asegurar que los Vingt regards… han desempeñado un papel crucial en la configuración de mi forma de tocar, el sonido que produzco y mi enfoque como intérprete». Su interpretación oscila entre la suave revelación (Regard du Père, la primera de las piezas de Messiaen del disco) y la radiante exaltación (Regard de l’Eglise d’amour, la última de las veinte «miradas»), transmitiendo espiritualidad a esta música a través de su tonalidad, que podríamos comparar con la gradación, matizada o contrastada, de la luminosidad de los vitrales de una iglesia…

Bertrand Chamayou interpretará este ciclo de Vingt regards… el 15 de junio en el Théâtre des Champs-Elysées, en París, y, seguidamente, el 26 de junio en los Rencontres Musicales d’Evian, así como en varios festivales este verano, entre ellos el Festival Messiaen au Pays de la Meije, donde también dará un concierto con la soprano Barbara Hannigan.